A veces pensamos que solo los niños y adolescentes que viven en familias desestructuradas y en entornos complejos necesitan ayudan psicológica. Y ciertamente en muchas ocasiones la necesitan, pero no solo ellos. También pueden necesitar ayuda niños y jóvenes que conviven en entornos estables y familias “convencionales”. Porque cualquier persona puede necesitar ayuda psicológica para un desarrollo con mayor bienestar y equilibrio.
Por tanto, tu hijo o hija, como cualquier otro niño, puede mejorar su calidad de vida, su autoestima y su desarrollo, con el apoyo de un profesional de la psicología.